Una gran parte de la historia que protagonizamos los seres humanos, mujeres y hombres, son procesos históricos, es decir encadenamientos o secuencias de hechos y acontecimientos conectados entre sí que van produciendo consecuencias que cambian las situaciones, el poder o las posibilidades de vida (o todas a la vez) de los grupos y clases sociales que forman las sociedades, incluyendo las sociedades-nación como la República Dominicana.

Esos procesos pueden hacer cambiar no solo las situaciones sociales en cualquiera o todos sus aspectos (economía, política, relaciones sociales, leyes, prácticas delictivas o criminales, conflictos, maneras de divertirse, folklore, relaciones entre los géneros, etc.) sino también la conformación de esos grupos y clases sociales en que va estructurando la sociedad, con sus correspondientes mentalidades, conductas y aspiraciones particulares. 

Se puede decir entonces que proceso histórico es un concepto que utilizamos para organizar en nuestras mentes los cambios históricos que podemos observar en el conjunto de la/nuestra sociedad y entender las conexiones entre esos hechos, tanto entre hechos simultáneos (sincrónicos) como consecutivos (diacrónicos), permitiéndonos entonces encontrarles un sentido, o sea, construir una explicación de ellos que nos resulte convincente. 

El concepto de proceso histórico tiene mucha importancia y utilidad porque nos ayuda a darnos cuenta que hay muchos aspectos de la realidad social que no se pueden entender sin los antecedentes o causas anteriores que los han provocado, y que con frecuencia han dejado de ser directamente visibles en el momento presente en que los podamos estar observando o analizando.

En Más de 500 Años de Historia proponemos que adoptemos colectivamente una mirada o visión del pasado nacional o colectivo como un proceso, como una dinámica de acontecimientos ocurridos en el tiempo y relacionados unos con otros que han ido provocando o generando distintos momentos históricos hasta llegar al momento histórico presente que nosotros protagonizamos, porque esa mirada nos ayuda a recordar y entender que nuestra sociedad, y la de nuestros antepasados, es una sociedad que va cambiando en el tiempo en la medida en que cambiamos nosotr@s mism@s y provocamos cambios en nuestra sociedad, a medida que generamos nuevas ideas y creencias y vamos modificando aspectos como la economía con la invención de nuevas técnicas y tecnologías.